Una foto de
una bomba nuclear detonada por el gobierno francés en el atolón de Mururoa,
Polinesia Francesa. original aquí.( Pierre J. / CC BY NC SA )
Los ecologistas y ambientalista
hemos elaborado infinidades de escritos sobre las causas del calentamiento
global, el CO2, el aumento de los gases efecto invernadero, la quema de
combustible fósiles por las industrias plantas termoeléctricas y vehículos, la ganadería y la agricultura,
los incendios forestales, la minería cielo abierto, la desforestación, etc. Son
pocos los que señalan entre las causas y mencionan la relación de los ensayos
nucleares con el calentamiento global, falta revisar las estadísticas desde
1945 hasta 1996, en esos años eran constantes los ensayos nucleares, sin
olvidar Hiroshima y Nagasaki. Esos años estaba desatada la carrera atómica y
aun hay países que añoran tener armas nucleares
y hacen sus ensayos sin importar el planeta y la humanidad. En las
cumbres sobre el calentamiento global hay que introducir como causas del
calentamiento global estos ensayos que rayan en la paranoia.
Para saber el daño causado a
nuestro planeta, es necesario conocer que los países que poseen arsenal nuclear
son: Estados
unidos, Rusia, Inglaterra, Francia, China, Israel, India y Pakistán, Corea del
Norte. Países que vienen realizando ensayos nucleares desde 1945, se
contabilizan más de 2050 ensayos nucleares, atmosféricos, marítimos y
subterráneos.
PAIS
|
CIFRAS
DE ENSAYOS
|
PERIODO DE TIEMPO
|
MEGATONES LIBERADOS
|
Estados Unidos
|
1032
|
1945 - 1992
|
179
|
Unión Soviética
|
715
|
1949 - 1990
|
285
|
Reino Unido
|
45
|
1952 - 1991
|
9
|
Francia
|
210
|
1960 - 1996
|
14
|
China
|
45
|
1964 – 1996
|
23
|
India
|
6
|
|
|
Pakistán
|
6
|
|
|
Total
|
2059
|
|
510
|
India realizó cinco ensayos en 1998 (India también realizó un ensayo
denominado como explosión nuclear pacífica en 1974.)
Pakistán realizó seis
ensayos en 1998.
La República
Democrática Popular de Corea anunció que había realizado un ensayo nuclear en
2006.
En los cinco decenios
que van desde 1945 a 1996, se realizaron más de 2.000 ensayos nucleares por
todo el mundo.
Después de que se
abriera para firmas el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares(TPCEN) en septiembre de 1996, se realizó aproximadamente media docena de
ensayos nucleares.
Con el
descubrimiento de la energía nuclear y con el desarrollo de la bomba atómica,
en sus ensayos y pruebas, se han diseminado por el planeta numerosos productos
residuales de las pruebas nucleares. En los últimos años la descarga en la atmósfera de materias radiactivas ha aumentado considerablemente, constituyendo
un peligro para la salud pública. Los más peligrosos son las pruebas nucleares
y las más letales para el daño ambiental y la salud pública son las que tienen lugar en la atmósfera. La
fuerza de la explosión y el gran aumento de temperaturas que las acompaña
convierten a las sustancias radiactivas en gases y productos sólidos que son
proyectados a gran altura en la atmósfera y luego arrastrados por el viento. La
distancia que recorren las partículas radiactivas así liberadas depende de la
altura a la que han sido proyectadas y de su tamaño. Pero las partículas más
finas pueden dar varias veces la vuelta a la Tierra antes de caer en un
determinado punto de nuestro Planeta.
Una columna
masiva de la subida del agua del mar como los EE.UU. detonar una bomba atómica
en el atolón de Bikini en el Pacífico en la primera prueba bajo el agua del
dispositivo, 25 de julio de 1946. (Foto AP)
Una vez
depositadas en el suelo, las partículas radiactivas pueden ser arrastradas por
la lluvia aumentando la radiactividad natural del agua.
Para los científicos
nucleares aun no están convencidos de que las
detonaciones atmosféricas generan grandes cantidades de óxidos de nitrógeno. Gas que a baja altitud contribuye al calentamiento (efecto invernadero) pero
que a las alturas a las que es transportado por las explosiones nucleares se
convierte en un potente gas reflector, que absorbe y priva a la superficie de
una parte importante de la radiación que incide sobre la Tierra.
Los
ensayos nucleares se han liberados, según cifras del Boletín Oficial del Científico Atómico 510
megatones, un equivalente aproximadamente a 15 mil bombas de las lanzadas en Hiroshima
y Nagasaki (34 Kilotón), lo espantoso es que el arsenal mundial alcanza unos 15
000 megatones de poder explosivo concentrados en números que varían entre 23
mil a 45 mil bombas atómicas.
Todos estos años hay un silencio
político-científico, sobre este tema, es evidente, se han buscado las causas
del calentamiento global a través de los años, pero jamás se fue contundente
contra el daño de la energía nuclear liberada a través de los ensayos y pruebas
atómicas y no solamente los aerosoles con sus clorofluorocarbonados
(CFC), porque no puede ser que estos ensayos atómicos en los tiempo de la
Guerra Fría no hayan producido abundante óxidos de nitrógeno en la atmosfera y
por el propio calor de las explosiones, lo que se materializa en un aumento de
la radiación ultravioleta y por consiguiente en esa época se potenciaron las
malformaciones, esterilidad, mutaciones y canceres y los cuales se
incrementaron por el aumento de la radioactividad en el ambiente. En el Boletín
de explosiones atómicas se oculta las explosiones suboceanicas, Sin considerar
que el pescado y
los derivados del mar forman parte principalísima de la cadena alimenticia
humana. Solamente se contabilizan las realizadas
en tierra y aire.
Hay países en este mundo de
avaricia y poder económico y militar que sueñan con fabricar bombas atómicas y
los que la poseen aunque firmen miles de tratados quisieran desarrollar
armamentos de destrucción masiva, poco les preocupa los efectos devastadores
que significan los ensayos nucleares y una guerra atómica, para eso, ellos
construyen y desarrollan Estaciones Espaciales,
como escapar de los daños causados por la
precipitación radioactiva sobre extensas zonas, el agotamiento del ozono por
los óxidos nitrosos de las explosiones nucleares y los cambios climáticos
producidos por el humo de grandes y prolongados incendios afectaría gravemente
a la mayor parte del planeta.
La humanidad, los 7 mil millones de seres que poblamos el planeta exigimos poner fin a uno de los experimentos más destructivos, terminar con los ensayos nucleares de una vez por todas y dejar el cinismo que mantienen los países que poseen arsenal nuclear.
Por un mundo más seguro ante la amenaza de las armas nucleares,
tenemos que aplaudir a los países que han ratificado el Tratado de Prohibición
Completa de los Ensayos Nucleares (TPCEN).
Son ocho países que faltan por
ratificar el tratado para que entre en vigor. Ellos son: China, Corea del
Norte, Egipto, Estados Unidos, India, Irán, Israel y Pakistán.
Durante las cinco décadas posteriores a la Segunda Guerra Mundial,
ensayos nucleares sacudían e irradiaban al planeta en promedio cada nueve días.
Esta era llegó a su fin en 1996, cuando el Tratado de Prohibición Completa de
los Ensayos Nucleares fue adoptado por la Asamblea General de las Naciones
Unidas. Sin embargo, para que el tratado pueda entrar en vigor es necesario que
lo ratifiquen los 44 países especificados en el tratado como poseedores de
tecnología nuclear. Hasta que estos países lo hagan, el peligro de los ensayos
nucleares continuará acechándonos.
Es urgente que el TPCEN alcance la vigencia jurídica completa en todo
el mundo lo más pronto posible. Una prohibición completa de todas las
explosiones nucleares obstaculizaría la modernización de los arsenales
nucleares existentes y el desarrollo de nuevas armas, reduciendo las
capacidades existentes y potenciales de los estados poseedores de armas
nucleares. El TPCEN refuerza tanto la no proliferación como el desarme nuclear
y es un elemento esencial para la seguridad global, regional y nacional.
Las Naciones Unidas, realiza esfuerzos
espasmódicos para imponer los tratados de prohibición del uso de las
armas nucleares. Un ejemplo es la resistencia de ocho países de ratificar el
Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCEN), si Estados Unidos no firma que ejemplo le está
dando a Irán, que también se niega a reconocer dicho tratado, al igual que
Corea del Norte; porque la ONU no impone sanciones económicas, financieras y
políticas a la administración Obama por negarse a firmar dicho tratado, así
como anteriormente el gobierno de Estados Unidos con el apoyo de la ONU ha sancionado, invadido y destruido a pueblos
como el de Irak, Afganistán, los Balcanes, Libia, etc. Mas si con este tratado
estamos salvado la vida del planeta.
El mundo sin armas nucleares puede
convertirse en la realidad solo en el caso de integración de los esfuerzos de
todos los países y pueblos, independientemente del hecho que si posean o no las
tecnologías nucleares. Es posible que hoy tengamos que comenzar a discutir el
asunto de aprobar en perspectiva la Declaración Universal del mundo sin armas
nucleares, en la cual podríamos fijar la disposición de todos los Estados ir
hacia los ideales del mundo sin armas nucleares.
Me encanto esta información, gracias por compartirla. Buen día
ResponderEliminar